La construcción del Tren Maya no afectará a los cenotes de Tulum o a la laguna de Bacalar, aseguró el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, en su conferencia de prensa mañanera de este miércoles, donde desmintió un supuesto cambio de coloración en el cuerpo de agua bacalarense, como han señalado algunos políticos de oposición.
En el caso de Tulum, el presidente recordó que el martes se llevó a cabo una reunión pública de información sobre el proyecto del Tren Maya tramo 5 Sur, que va de Playa del Carmen a Tulum.
Reiteró que no son los campesinos o los propietarios de la tierra los que se oponen al tren sino grupos financiados por los adversarios políticos, a quienes calificó como seudoambientalistas, “esos que se quedaron callados o no vieron los que estaba haciendo la empresa Vulcan, de Estados Unidos”.
“¿Saben qué nivel de destrucción del medio ambiente es lo de Vulcan, ahí mismo, en Playa del Carmen?, pues es un nivel de catástrofe ecológica, más de 2 mil hectáreas para llevarse material y construir las carreteras en Estados Unidos”, manifestó el presidente. “Ya no se va a permitir extraer nada de piedra, ya no se va a usar como banco de material esta región”. E indicó que el gobierno federal tuvo que enviar expertos de la Secretaría de la Defensa Nacional para desactivar la dinamita que utilizaban para la explotación del banco.
Por su parte, la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) dio a conocer mediante un comunicado detalles de la reunión celebrada en Tulum, donde asistieron personas interesadas del ámbito académico, investigadores, agrupaciones sociales, organizaciones no gubernamentales y sociedad en general, quienes tuvieron la posibilidad de manifestar libremente sus preguntas, observaciones y propuestas, las cuales, serán integradas al expediente de la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA).
“La reunión pública de información fue un espacio de encuentro en el que, de manera libre y directa, las y los ciudadanos con interés legítimo y genuino de proteger el medio ambiente dialogaron con el promovente del proyecto, que es el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur)”, destacó la dependencia.
Informó que se tuvo el registro de 20 ponencias, la asistencia de más 351 personas (124 mujeres y 227 hombres) y la recepción de 72 preguntas que serán integradas al expediente de la MIA.
Laguna de Bacalar
En lo que corresponde a un posible cambio de coloración de la laguna de Bacalar por las obras del Tren Maya, el presidente mostró en un mapa la zona en la que se trabaja (correspondiente al tramo 1, en Chiapas, y al 4, en Yucatán), la cual tiene “una composición geológica y un terreno completamente diferente”. Hay aproximadamente 300 kilómetros entre los lugares donde actualmente se trabaja y Bacalar.
Reiteró que en Quintana Roo no se está trabajando en ningún tramo, pues en el 5 tienen un amparo que suspendió las obras y en el 6 y 7, que corresponden al sur de la entidad, aún no se ha iniciado. “¿Cómo es que van a cambiar los colores o que ya están cambiando si todavía no se está trabajando?”, cuestionó.
Con información de La Jornada