Un niño de siete años murió en la clínica privada Hospiten tras caer por accidente en una piscina en el hotel Grand Oasis.
El accidente se produjo en la zona hotelera a la altura del kilómetro 16.5 del boulevard Kukulcán, en Cancún.
Paramédicos de la empresa particular Life Support acudieron al centro de hospedaje para auxiliar al niño y trasladarlo al hospital privado donde desafortunadamente poco después perdió la vida.
Más tarde al nosocomio arribaron Agentes Ministeriales y Policías Municipales para recabar información del caso.
En el hospital, autoridades entrevistaron a la hermana del niño quien mencionó que se encontraba nadando en la alberca del hotel, luego salió por una bebida tardando aproximadamente 10 minutos y al regresar se dio cuenta que le estaban dando reanimación cardiopulmonar a su hermanito por los empleados del hotel, debido a que había caído por accidente en la alberca.
Posteriormente llegó una ambulancia cuyos paramédicos lo trasladaron al hospital donde más tarde les informaron que había fallecido.